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Cuáles son los monumentos destruidos por los islamistas en todo el mundo

En Mali, en Irak, en Afganistán y en varios otros países, los integristas musulmanes destruyeron valiosos patrimonios de distintas culturas.

El regreso de los talibanes al poder en Afganistán es fracaso para el mundo entero, la cultura incluida. En esta nota, recordamos algunos de los sitios y de las obras de arte destruidas por el integrismo religioso musulmán. 

Los talibanes afganos dinamitaron en 2001, hace unos 20 años, los dos gigantescos Budas de Bamiyan. Eran monumentales obras de más de 50 metros que se podían a ver kilómetros a la redonda y eran dos de los principales símbolos culturales del país. Habían sido tallados entre los siglos VI y VII en la pared rocosa de una montaña antes de la islamización de Afganistán, cuando esa región del mundo era uno de los principales centros del budismo en el mundo. 

Esta práctica no es nueva ni tampoco es exclusiva de los actuales integristas religiosos. Apenas vencieron los ejércitos incas o aztecas, los españoles destruyeron sus templos y levantaron iglesias encima de ellos. Y antes de ellos, los incas habían impuesto sus cultos a otras poblaciones que conquistaron a lo largo de la Cordillera. Nuestra era hyperinformada y conectada magnifica esta práctica y la difunde en tiempo real, dándole la impresión de ser una práctica solamente asociada con nuestros tiempos de fanatismos religiosos o ideológicos.

Afganistán: los Budas de Bamiyán fueron destruidos en 2001 por los talibanes que rechazan la representación de formas humanas. En estas fotos: antes y después de la destrucción.  

Siria: la ciudad antigua de Palmira fue vandalizada por las bandas armadas del Estado Islámico, cuando controló la zona, a partir de 2015. Hasta ese año, se conservaba un magnífico complejo de ruinas y vestigios de lo que fue el mayor oasis y el principal nexo comercial entre Occiente y Oriente entre el primer siglo antes de Cristo y hasta el Siglo II. Era una de las más lindas y más prósperas ciudades de todo el Imperio Romano y la destrucción del sitio fue considerada como "un crimen intolerable contra la civilización", como lo declaró en 2015 la entonces Directora General de la UNESO, Irina Bokova. 

Explosivos para destruir las ruinas antiguas de Palmira. 

En esta nota publicada al inicio de las cuarentenas por la pandemia de Covid 19, en 2020, se ofrece un paseo virtual por el sitio de Palmira.

Irak: en medio de las convulsiones que sacuden el país luego de la caída de Saddam Hussein, se realizaron varios atentados contra bienes culturales y sitios arqueológicos, en la región del mundo donde nacieron algunas de las civilizaciones más antiguas de la humanidad. Se recuerda particularmente la destrucción del sitio de Hatra (en la foto de apertura), una plaza fuerte fortificada construida hace 2.000 años que fue capital de un reino y vio convivir las culturas orientales con la griega y la romana. Las facciones del Estado Islámico arrasaron parte de las ruinas con palas y picos y difundieron filmaciones de sus destrucciones en las redes sociales. Otro sitio iraquí que fue víctima de la ira de los integristas islámicos fue Nimrud, una ciudad fundada hace más de 3.000 años y fue capital del Imperio Asirio. Los bajo relieves y las obras arqueológicas fueron destruidas o saqueadas para ser vendidas sobre el mercado negro de las antigüedades. El dinero recaudado servía a financiar el Estado Islámico. La misma suerte tuvieron las obras del museo de Mosul, la segunda ciudad más importante de Irak. Los fanáticos también atacaron sitios religiosos de su propio credo y arrasaron dos mezquitas, incluyendo la de Nabi Yunus (del profeta Janús, un lugar sagrado para las tres religiones monoteístas). 

Fanáticos destruyendo obras arqueológicas en Nimrud. 

Mali: Tombuctu es una de las ciudades más sagradas de África, con una quincena de mausoleos de santos musulmanes. Fueron destruidos todos por los terroristas vinculados con Al-Qaida. Aquellos monumentos habían sido construidos hace más de siete siglos. En 2016, la Corte Internacional lo delcaró como un "crimen de guerra". Desde entonces, fueron reconstruidos de manera tradicional y están ahora protegidos por la UNESCO. 

Un mausoleo totalmente arrasado. 

Uno de los mausoleos siendo reconstruido con técnicas tradicionales. Fotos: Wikimedia y telediarios de época. 

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