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Alemania celebra los cien años del Bauhaus

La escuela que revolucionó el diseño en el mundo surgió en Weimar en 1919.

El Bauhaus revolucionó el pensamiento creativo a principios del siglo XX. Fue fundado en Weimar en 1919 por el arquitecto Walter Gropius, defensor del concepto de "obra de arte total". Fue al mismo tiempo una escuela de arte y de arquitectura que floreció en Alemania entre 1919 y 1933. Pero es en Tel Aviv, en Israel, donde se conserva el mayor conjunto arquitectónico de este movimiento.

El Bauhaus unió bellas artes, artesanía, arquitectura y tecnología y logró extenderse a otras disciplinas y prácticas como el cine, el teatro, la escultura o la cerámica. Su objetivo era de atender las necesidades prácticas de la población, unificando el arte a las nuevas tecnologías que estaban revolucionando el mundo a principios del siglo XX.

Sus adeptos comenzaron a utilizar nuevos materiales para la construcción, principalmente el acero y el hormigón, con una metodología progresista y experimental que incluía técnicas didácticas innovadoras que todavía hoy en día están en uso en muchas escuelas de diseño. 

Los tres tiempos del Bauhaus

El movimiento del Bauhaus se desarrolló en tres periodos. El primero floreció bajo la dirección de Walter Gropius, de 1919 a 1925.  Su sede estuvo en Weimar, donde fue fundada la efímera República alemana sobre parte de los territorios del derrotado Imperio prusiano de Guillermo II, a fines de la Primera Guerra Mundial.

Alrededor de Gropius, la escuela contó entre sus maestros a Paul Klee, Oskar Schlemmer, Wassily Kandinsky y László Moholy-Nagy. Walter Gropius pensaba que el arte debía volver a desempeñar un papel social. Su escuela estuvo abierta a todos los alumnos, sin importar su formación académica, su género o su nacionalidad.

Entre 1925 y 1932, la escuela se mudó a Dessau donde inauguró su propia sede en 1926. Con las Casas de los Maestros diseñadas por Gropius, Dessau tuvo una colonia de artistas prominentes, que podía rivalizar con la comunidad artística del Monte Veritá de Lugano (Suiza) o con el hervidero cultural e intelectual que era París y el barrio de Montmartre durante los mismos años. En 1928 Hannes Meyer sucedió a Gropius en la dirección de la escuela; hasta 1930 cuando fue reemplazado por Ludwig Mies van der Rohe. 

Este arquitecto -que se exilió en los Estados Unidos a partir de 1939 para huir de la Alemania nazi- fue el último director de la escuela Bauhaus, en los años 1932 y 1933. La escuela se había entonces mudado a Berlin donde funcionó hasta que fue clausurada por la policía y la temible SA del partido de Hitler (la Sturmabteilung, Sección de Asalto). 

Las características del Bauhaus

Una de las características principales de este movimiento es la utilización de los colores primarios junto al blanco y el negro. Los artistas de Bauhaus revindicaban el minimalismo para hacer más efectivos sus diseños. La escuela introdujo las formas geométricas en sus patrones, bajo la influencia del cubismo. Como en las obras de Mondrian, los adeptos del Bauhaus integraban cuadrados, formas básicas, planos de color y líneas en sus creaciones.

En relación al uso de texto y la creación de piezas gráficas, el movimiento rompió con lo establecido e introdujo textos en vertical y en diagonal, o alrededor de imágenes.

El Bauhaus en Tel Aviv

Más que en Alemania, donde el desarrollo de la escuela fue frenado y censurado por los nazis, el movimiento encontró una tierra de predilección en Israel y más particularmente en Tel Aviv. Fue llevado a las orillas del Mediterráneo por los judíos alemanes que huían del nazismo durante los años 1930. Llevaban  con ellos las ideas y las líneas del Bauhaus para realizar construcciones, desde edificios públicos hasta casas particulares. 

A 4.000 kms de Weimar, los arquitectos de Tel Aviv levantaron en los años 1930 unos 4.000 edificios de fachadas blancas y volúmenes geométricos que eran inspirados directamente por las ideas del Bauhaus. Buena parte de estas construcciones siguen en pie y siguen dando una singular unidad a la principal ciudad de Israel. Es lo que se conoce como la Ciudad Blanca, cuyo corazón es la Plaza Dizengoff con sus cafés, su fuente y el Hotel Cinema. 

El centenario del Bauhaus

Se realizan más de 500 eventos en Alemania a lo largo de 2019. Hay exposiciones, conferencias y presentaciones y el ente oficial de turismo alemán preparó circuitos temáticos. 

Las tres instituciones de la Bauhaus (Fundación Clásica Weimar, Fundación Bauhaus de Dessau y Archivo Bauhaus de Berlín) presentan exposiciones sobre el legado de los movimientos antecesores y exhiben tesoros de sus colecciones que nunca habían sido mostrados hasta el momento.

El Circuito Bauhaus para viajeros independientes se puede realizar en cinco días entre Berlín, Weimar y Dessau, en tren, bus, auto particular y hasta en bici. Durante el recorrido hay visitas guiadas en Weimar (del Museo Bauhaus y del Taller de cerámica Bauhaus en Dornburg) y es posible conocer la mansión Schulenburg en Dessau. Finalmente en Berlin se recorren urbanizaciones como Hufeisensiedlung y Siemensstadt y se conoce el Monumento Bauhaus de la Escuela Federal Bernau (que forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO). 

La fachada del Museo Bauhaus de Weimar. 

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