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Aviación: se profundiza la destrucción masiva

La pandemia no cede y el sector del transporte aéreo siguen hundiéndose. Un panorama de las últimas noticias del sector, con posibles quiebras y rutas que no volverán.

El mundo de la aviación comercial está esperando que los directores de South African Airways formalicen el pedido de quiebra de la empresa. Si desaparece, será una parte importante de la aviación civil africana que desaparecerá también. Virgin Australia está en una postura idéntica, al igual que Norwegian. Al mismo tiempo, muchas otras empresas buscan protecciones o salvaciones financieras de parte de sus estados; y otras anunciaron cierres definitivos de rutas. El covid 19 hundió el transporte aéreo en la peor crisis de su historia y nada será más como antes. 

Una caída brutal

Hasta principios de este año, la aviación comercial era un sector que nadie podía parar y que crecía al ritmo de 5% por año. Duplicaba su volumen cada 12 años. Al mismo tiempo, la cantidad de accidentes se iba reduciendo notablemente lo que favorecía la elección de este modo de transporte sobre otros. Los constructores acompañaron este crecimiento con aviones cada vez más grandes y tuvieron ritmos de producción cada vez más sostenidos. Los viajes en avión se volvieron así muy accesibles con precios cada vez más tentadores.

Para el 2020, se esperaba un total de 8 mil millones de pasajeros y un volumen de actividad de US$ 1.600 mil millones a nivel mundial. Pero esto ahora es historia... El 80% de las flotas no vuelan actualmente y los potenciales pasajeros tienen que respetar confinamientos prolongados en sus domicilios hasta fechas todavía inciertas. La OACI (Organización de la Aviación Civil Internacional) estima que 2020 contará con 1,2 mil millones de pasajeros menos que 2019. La principal contracción se notará en Europa, donde se acerca la temporada de verano. 

En la Argentina la epidemia empujará a una de cada dos personas por debajo de la línea de pobreza. En el resto del mundo también las economías van a achicarse este año, aunque no de una manera tan brutal. En Asia, las pujantes clases medias serán sin duda el motor para que la industria de los viajes y del turismo vuelva a arrancar. En Europa Occidental y en América del Norte, la epidemia llegó más tarde y tardará más en debilitarse.

A continuación, un repaso de las últimas noticias emitidas por varias compañías de todo el mundo: 

Air Canada: informa hoy que suspenderá todas sus rutas hacia los Estados Unidos entre el 26 de abril y el 22 de mayo. Los vuelos al país vecino representan un cuarto del total de su red.  

Norwegian Air Shuttle: la low-cost noruega que intentó hacer pie en la Argentina con una filial (cerró sus puertas el año pasado y vendió sus rutas a JetSmart) anuncia la quiebra de cuatro de sus filiales en Suecia y Dinamarca. Para los trabajadores, esto significa la pérdida de 4.700 puestos de trabajo.

Air France: la compañía francesa junto a su aliada KLM está negociando ayudas multimillonarias con los gobiernos de los dos países. Desde París, la empresa adelanta que quiere recuperar el 30% de su trafico entre el 11 de mayo (cuando terminará el confinamiento en Francia) y el mes de julio. Actualmente trabaja con solo el 5% de su capacidad. 

Air Mauritius: La isla Mauricio es una de las economías más prósperas del continente africano y suele tener los mejores indicadores sociales, humanos y económicos de su región. Es también un destino turístico muy importante. La epidemia golpeó duramente ese sector y puso en peligro la compañía nacional que acaba de pedir protección al estado. Air Mauritius es una de las más antiguas en África y cumple 51 años. 

Austrian Airlines: la pequeña compañía austríaca depende del gigante Lufthansa. Acaba de presentar uno de los planes más pesimistas de Europa. Ya era debilitada dentro de su país por el movimiento de la "vergüenza de volar" y planeaba cerrar la mayoría de sus rutas domésticas. Anuncia ahora que se desprenderá de un cuarto de su flota (tenía 83 aviones todavía a principios de mes). Prevé una baja de la demanda de entre 25 y 50% a mediano plazo y hasta un 75 % durante lo que queda del año. 

South African Airways: los empleados esperan recibir sus telegramas de despido a fines de este mes. 

Malaysia Airlines: fue una de las más pujantes a principios del milenio pero dos accidentes sucesivos la debilitaron. La pandemia podría darle el golpe de gracia. Su única salvación sería una fusión con Air Asia, otra empresa del  mismo país asiático. 

Virgin Atlantic: la empresa del magnate británico Richard Branson está también en graves problemas. La filial australiana acaba de anunciar su quiebra y Virgin Atlantic pidió un préstamos de US$ 615 millones. Branson puso su isla privada en las Islas Vírgenes Británicas como garantía financiera y declaró que "con el equipo de Virgin Atlantic, haremos todo nuestro posible para mantener la compañía aérea". Este anuncio llega en un momento en el cual las opiniones públicas europeas se muestran muy reacias a usar el dinero público para salvar las empresas aéreas. Virgin Atlantic es propiedad del Virgin Group (51%) y de la norteamericana Delta (49%) que recibirá un préstamo de US$ 1,6 mil millones de parte de Washington. 

Virgin Australia: Branson reconoció que la empresa entró en un proceso de cese de pagos. Pero aclaró que "no es el fin para Virgin Australia y su cultura única. No soy de los que abandonan las partidas y les aseguro que todos -incluyendo nuestro competidor Quantas- queremos ver Virgin Australia operar pronto de nuevo". 

Copa Airlines: el grupo panameño anunció que retomará sus vuelos a partir del 1º de junio luego de haber recibido “los permisos requeridos por las autoridades correspondientes de los demás países de la región”. Empezaría con el 10% de sus capacidades e iría recuperando paulatinamente el resto de su potencial, aunque se sabe que algunas rutas estarán descartadas.

Air New Zeland: la empresa acaba de anunciar que no volverá a volar a Buenos Aires. Pondrá un fin a una conexión que duró varios años y acercó Oceanía con América Latina luego de que Aerolíneas Argentinas abandone su ruta entre Buenos Aires y Australia a principios de la década pasada. La empresa kiwi tampoco volverá a volar entre Los Ángeles y Londres y volará non-stop entre Auckland y Nueva York recién a fines del año.

LATAM: el grupo chileno-brasileño no hizo ningún comentario oficial, pero hay rumores cada vez más insistentes acerca de su situación en la Argentina. Es muy probable que deje de volar dentro del país y que se limite a proponer conexiones internacionales. Aunque no se hayan realizado declaraciones oficiales, los directivos de la empresa reconocen que las operaciones en la Argentina carecen de sentido con la situación económica que se espera en el país al salir de la pandemia. Se agregan además conflictos gremiales superiores a la normal y un regreso de situaciones hostiles como las que sufrió la empresa hasta hace cuatro años. El costo laboral muy alto y una tasa de uso del avión muy baja complican además la empresa, como todas las demás que operan en la Argentina. El país tiene una de las tasas per capita de viajes en avión entre los más bajos del mundo.

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