En Islandia, los turistas pueden hacer un juramento para ser viajeros responsables durante toda su estadía. Es la manera que promueve la isla para crear conciencia ambiental y compromiso y así contrarrestar los efectos más negativos del sobreturismo. Varios otros destinos siguen su ejemplo.
Cada vez más destinos turísticos en el mundo implementan cartas de compromiso para fomentar un turismo sostenible y respetuoso. De Islandia a Nueva Zelanda, estas iniciativas ganan fuerza y proponen una nueva manera de viajar.
El turismo global vive una transformación silenciosa pero contundente: la adopción de “cartas del viajero responsable”. Estas iniciativas, impulsadas por destinos turísticos de todo el mundo, buscan educar, concienciar y comprometer a los visitantes a adoptar comportamientos respetuosos con el entorno, las culturas locales y las comunidades anfitrionas.
En el contexto de una creciente preocupación por el impacto ambiental del turismo masivo, estas cartas proponen un pacto simbólico y, en algunos casos, firmado, entre el visitante y el territorio. A continuación, un recorrido por algunas de las propuestas más destacadas del mundo.
🇮🇸 Islandia y su “Icelandic Pledge”: pionera en el turismo consciente

Islandia fue la primera nación en lanzar una carta oficial del viajero. En 2017, ante la explosión de visitas turísticas, el país escandinavo creó el “Icelandic Pledge”, un juramento que se presenta en aeropuertos y alojamientos, y que invita a los viajeros a comprometerse con reglas simples pero poderosas: no salirse de los senderos marcados, acampar en lugares autorizados, y actuar con respeto hacia la naturaleza islandesa.
Este código de conducta posicionó a Islandia como un modelo de turismo sostenible, y fue adoptado con entusiasmo tanto por locales como por visitantes.



🇳🇿 Nueva Zelanda y la “Tiaki Promise”: guardianes del hogar común
Nueva Zelanda lanzó la “Promesa Tiaki”, un llamado a los viajeros a actuar como guardianes del país, protegiendo no solo la naturaleza, sino también la cultura maorí y la convivencia con la población local.
Con el apoyo de la aerolínea nacional y campañas audiovisuales de alto impacto, esta carta destaca cinco principios clave: proteger la naturaleza, mantener el país limpio, estar preparado, conducir con seguridad y mostrar respeto. La promesa Tiaki trasciende el simple viaje: propone una nueva filosofía de relación entre visitantes y territorio.


🇳🇴 Noruega: carta de buena conducta en las Islas Lofoten
En Noruega, Visit Norway impulsó una carta específica para las Islas Lofoten, consideradas unas de las más bellas del mundo. La guía propone acciones concretas como campar solo en lugares habilitados, usar baños públicos y respetar las propiedades privadas.
La intención es proteger tanto el frágil ecosistema local como la experiencia de otros turistas, asegurando que el crecimiento del turismo no comprometa los recursos naturales ni la vida cotidiana de los residentes.

🇫🇷 Francia: de Bretaña al lago Annecy, la conciencia se regionaliza
En Francia, Bretagne (Bretaña) fue la primera región en implementar una carta del viajero a nivel regional. Iniciada en el Golfo del Morbihan, hoy se extiende por todo el territorio bretón. Con un tono creativo y cercano, la carta incluye frases como “los viajeros no cuentan para el beurre” o “se graban momentos en la memoria, no en las piedras”.
Por su parte, el lago de Annecy también lanzó su propia carta basada en seis pilares, donde la identidad local, la movilidad sostenible y la participación activa del viajero son ejes clave. Se busca construir una comunidad alrededor del hashtag #ÊtreAnnecy, fusionando turismo y pertenencia.

🌍 Una tendencia global en crecimiento
El fenómeno de las “charters de viajero responsable” continúa expandiéndose, y no se limita a Europa u Oceanía. En Japón, por ejemplo, algunas regiones como Kyoto impulsan códigos de conducta para evitar el overtourism/sobreturismo en barrios históricos. En Costa Rica, se promueven compromisos de preservación en áreas protegidas y parques nacionales.
Cada iniciativa adapta sus mensajes a las realidades culturales, sociales y ambientales de su territorio, pero todas comparten un objetivo común: fomentar un turismo más consciente, empático y sustentable.
Deja un comentario