Actualidad

El planeta perdió el 68 % de su fauna desde 1970

La COP 15 de la Biodiversidad se reunirá en diciembre en Canadá y el WWF la anticipa con esta dramática constatación.

La biodiversidad suele ser simbolizada por algunas especies animales muy llamativas, como el oso panda. Pero es un concepto mucho más amplio. Es el conjunto de los genes, de las especies (animales o vegetales) y de los ecosistemas, junto con sus interacciones.

De la misma manera que el clima tiene sus cumbres mundiales y en 2022, la COP17 se reúne en Egipto; la biodiversidad tiene las suyas. La COP15 de la Biodiversidad se reúne este año en Montreal, Canadá, del 7 al 19 de diciembre de 2022. Es un evento que forma parte del calendario de las Naciones Unidas. 

Ya se sabe que durante esta cumbre mundial, los especialistas y los biólogos tratarán de alertar el mundo sobre la pérdida de la biodiversidad, un problema tan grave para nuestro planeta y para la humanidad como el cambio climático. Ambos están además vinculados por una excesiva actividad humana, que modifica y destruye los equilibrios naturales de nuestro planeta. 

El WWF, una de las mayores ONG de protección de la naturaleza, publicó un informe en previsión de la COP15 de la Biodiversidad. Sus especialistas alertan que se exterminaron los dos tercios (un 69 % para mayor precisión) de las poblaciones de la fauna mundial. En 2018 quedaba apenas un tercio de los peces, aves, mamíferos, anfibios o reptiles que había en 1970. Es lo que nos indica de manera dramática el índice Planeta Vivo que el WWF publica cada dos años. 

La principal causa de la pérdida de biodiversidad animal es la destrucción de los hábitats naturales. Y en esto, América Latina está en la cabecera del mundo con la tala sistemática de gigantescas zonas de bosques. Se habla mucho del Amazonas brasileño, pero todos los países del continente tienen su parte de responsabilidad. Paraguay destruyó la casi totalidad de su monte nativo, la Argentina desmontó inmensas regiones en el norte del país y principalmente en el Gran Chaco. Bolivia es otro país donde se destruyeron enormes superficies de selva tropical. Indonesia y varios países africanos también figuran entre los mayores depredadores de ecosistemas naturales. 

Se estima que había una población de 100.000 guepardos a principios del siglo XX. Son menos de 10.000 en la actualidad. 

En lo que se refiere al Amazonas, el pulmón verde de nuestro planeta, varios científicos piensan que se sobrepasó el punto de retorno y que antes de fines de este siglo, la selva estará reemplazada en su casi totalidad por una llanura de pastizales. América Latina es particularmente señalada en el informe del WWF. Se habla de una situación "realmente espeluznante", con una tasa de desaparición de la biodiversidad que trepa hasta un récord mundial de 94 %. En el otro extremo, Europa que tenía muy malos resultados en los años 1970 hizo enormes esfuerzos de restauración y de conservación y la tasa de pérdida de biodiversidad en ese continente es de tan solo 18 % entre 1970 y ahora. 

Otro factor que provocó la pérdida de biodiversidad animal es la sobreexplotación (en el caso del mar, muy concretamente) y la caza (furtiva o no).  A todo esto se suma el rápido deterioro del clima de nuestro planeta, también provocado de manera antrópica. Finalmente, la contaminación del aire, de los suelos y del agua es un último factor que tiene una incidencia directa en la pérdida de biodiversidad, tanto vegetal como animal. Se suma otro flagelo, que no suele ser detectado de manera tan directa como los anteriores: las actividades humanas diseminan especies invasivas que ocupan rápidamente el lugar de otras y reducen aún más la diversidad genética que existe en nuestro mundo. 

La casi totalidad de los grandes simios de África y Asia están en peligro de extinción. 

Para llegar a la muy preocupante cifra de 68 % de desaparición de la fauna terrestre, el WWF elabora un índice junto a la Sociedad Zoológica de Londres. Se analizan las poblaciones de 32.000 especies y se estudia como reaccionan a los cambios de sus hábitats. Este estudio empezó en 1970 y se toma ese año como referencia para comparar con los datos más recientes. 

Durante la cumbre de Montreal se publicará otro dato muy preocupante: desde el inicio del año 2022, 31 especies desaparecieron. Y muchas otras llegaron a puntos muy preocupantes. Sean gorilas, tortugas luth, tiburones, corales, la supervivencia de muchos organismos y animales no está asegurada. Por todas estas razones, el WWF lanzó un llamado antes de la COP 15 de Montreal para que los gobiernos adopten un acuerdo mundial muy ambicioso, similar a los Acuerdos de París que fueron firmados en 2015. 

El kakapo es un ave de Nueva Zelanda que está en peligro de inminente desaparición. 

Los manatíes son doblemente impactados por la sobreexplotación de su ecosistema y por la contaminación del agua. 

• Compartir en